Entre las distintas emociones distinguimos las que
son placenteras y las que son displacenteras. Dentro de las primeras están la
alegría y el afecto y dentro de las segundas la tristeza, la rabia y el miedo.
También se sabe que las personas tendemos a buscar
el placer y a alejarnos del displacer. Esto no está mal pero hay situaciones
donde lo más sano es sentir y expresar una emoción auténtica displacentera. No
es bueno evitarlas siempre y tampoco es posible. De hecho si recorremos nuestra
historia personal comprobaremos que en los momentos dolorosos de nuestra vida
hemos crecido mucho y hemos descubierto recursos y fortalezas ocultos dentro
nuestro hasta entonces.
Pero a veces por querer evitar el sufrimiento
vivimos una vida a medias porque también vivimos a medias los momentos plenos.
En general si una persona tiene miedo a sentir rabia o tristeza estará
bloqueada también para sentir alegría, placer y afecto.
Parecería ser entonces que las emociones son como
una manifestación interna que tiene que ser expresada como parte de nuestro ser
y esta expresión pugna por salir a la superficie de cualquier manera. En otras
palabras es imposible reprimir las emociones, estas necesitan expresarse si no
adecuadamente a través de alguna emoción sustitutiva aprendida en la infancia
con un costo extra o en otros casos a través de síntomas físicos.
Algunos beneficios de la expresión de las emociones
auténticas son:
¥ Incrementar
la salud mental y física
¥ Aumentar la
autoestima
¥ Hacer
frente a situaciones conflictivas
¥ Aumentar la
autoconciencia (tener mas conciencia de uno mismo, de sus pensamientos y
sentimientos)
¥ Mejorar e
incrementar las relaciones interpersonales
¥ Poner
límites adecuados e imponer mi autoridad
¥ Poder
manifestar mi enojo adecuadamente
¥ Cortar los
vínculos nocivos
¥ Tener
mayores logros en todas las áreas.
Una emoción es el significado subjetivo y sentido
que se la da a una experiencia. Esto quiere decir que según cómo cada persona
interprete una situación será la emoción que sienta, por eso ante un mismo
hecho distintas personas sienten distintas emociones.